QUIENES SOMOS?

El Instituto de Desarrollo Económico y Capacitación Agraria – IDECCA es una asociación civil de derecho privado, sin fines de lucro, comprometida con la mejora de las condiciones y oportunidades socioeconómicas de comunidades, sectores y grupos sociales vulnerables y excluidos. Nuestra labor se orienta a promover su desarrollo integral, protegiendo y fortaleciendo su identidad cultural, espiritual, mental y emocional, en armonía con el medio ambiente. Trabajamos con la convicción de que el bienestar social se construye desde la promoción de los valores humanos, la consolidación de la familia como núcleo fundamental de la sociedad y la búsqueda de la felicidad como derecho y propósito colectivo. Desde esta visión, IDECCA impulsa acciones que restauran la dignidad, la unidad y el desarrollo sostenible de las poblaciones con las que se vincula.

IDDECA está dirigido a la población de las zonas altoandinas y nativas del Perú, buscando el desarrollo integral de los participantes, promoción del desarrollo social y económico local y, sobre todo, el fortalecimiento de las comunidades campesinas y nativas, permitiendo mejorar la calidad de vida de la población. Asimismo, busca promover la innovación agraria, fomentar la investigación y el desarrollo en el sector, gestionar los recursos y promover la modernización de la gestión institucional.

MISIÓN


La misión de IDDECA se enfoca en la formación integral de comuneros y pobladores de las zonas altoandinas y nativas peruanas del sector agropecuario, promoviendo el desarrollo sostenible, la innovación y la mejora de la calidad de vida en las comunidades campesinas.

VISIÓN


La visión de IDDECA se centra en convertirse en una institución líder en educación agraria, investigación, innovación y extensión, generando conocimiento y tecnologías para el progreso del sector agroalimentario, de la población de zonas alejadas del Perú.

VALORES


Para IDDECA la educación y formación en valores, constituye un componente estratégico del trabajo educacional corporativo, reconociendo en ellos la guía para alcanzar los objetivos institucionales y la orientación del trabajo educativo.

Considerando como base de formación los valores trascendentes (Dios, el amor, la familia, la libertad, entre otros) y los valores de desarrollo (autoestima, autonomía, autorrealización, entre otros), se definen como valores institucionales, que identifican al estudiante los siguientes:

Honestidad: Forma de vida, comprometida con la verdad, caracterizada por la congruencia entre lo que se piensa, se dice y actúa.

Responsabilidad: Condición humana comprometida para responder ante sí mismo o ante los demás, por sus actos u omisiones, sean intencionadas o no intencionadas.

Solidaridad: La disposición de acoger, comprender y asumir, desinteresadamente, las necesidades de los demás.

Respeto: Disposición para la comprensión y aceptación de la dignidad de las personas como seres humanos, reconociendo derechos y deberes, cultivando una actitud dialogante.

Perseverancia: Persistencia inquebrantable en el ejercicio de acciones positivas destinadas al bien propio o ajeno, a pesar de los obstáculos.